Estrenamos nueva serie de artículos en Go Multiplayer dedicados a hablaros de juegos multijugador o masivos online a los que nos gusta meter mano en los ratos muertos, en aquellos huecos en los que no sabemos a qué darle y nos da pereza jugar a ningún otro juego que requiera más tiempo o atención del que tengamos ganas en ese momento. Ahora que estamos disfrutando de la interminable ola de calor veraniega seguro que más de uno, de los que no os habéis podido escapar a la playa o la piscina, habrá pensado bueno, a qué juego le doy ahora.
Hoy os queremos hablar de un juego que a primera vista parece muy simplón, pero que termina teniendo mucha miga y engancha a la que te despistas. Se trata de Agar.io. ¿Os acordáis de los primeros pasos que dábamos en Spore? En los que no éramos más que un renacuajo y había que ir devorando a seres más pequeños que nosotros y evitar ser devorados por los más grandes.
Pues bien, no hay que irse más lejos, esa es exclusivamente la dinámica que encontramos en Agar-IO: Comer y evitar ser comido. Sin olvidar que la máxima de ‘El pez grande se come al chico’ siempre se cumple, por muy grandes que seamos. Empezamos siendo una pequeña “célula” y según vayamos alimentándonos o absorbiendo a otros jugadores, células, más pequeños que nosotros iremos haciéndonos mayores. Así que básicamente se trata de un corre, corre, que aquí te pillo, pero con algunos elementos que aportan estrategia y destreza al juego.
Con el cursor del ratón indicamos la velocidad y ahora con la tecla “Espacio” podemos multiplicarnos, con lo que reducimos nuestro tamaño unitario pero abarcamos más espacio. Con la “W” podemos expulsar parte de nuestra masa para reducir nuestro tamaño. Esto se puede utilizar tanto para ganar velocidad en un determinado momento en el que necesitemos escapar de la persecución de otro jugador o bien para hacer que nuestra presa la absorba y se haga más lenta.
Hay muchas tácticas a seguir para comernos a otros jugadores o esquivarlos, muchas veces usando a otros jugadores que puedan ser depredadores de nuestro perseguidor pero que nosotros podemos esquivar fácilmente, para hacer que nos dejen en paz un rato. Como os hemos dicho es un juego muy muy simplón, pero que no está nada mal para matar el rato. Gráficamente, como véis en las fotos, es de lo más básico pero increíblemente su idea funciona. Podremos disfrutar de un modo libre de todos contra todos y luego de otro por equipos principalmente, aunque se van a añadir otros nuevos.
De hecho, son miles los jugadores, especialmente de Europa que ya le están dando un tiento. Se puede jugar sin necesidad de registro, pero si os registráis con Facebook tendréis acceso a algunas habilidades extra, como proyectaros hacia adelante, y personalizar vuestra célula. Si os ha convencido, podéis jugarlo ya mismo gratis a través del enlace al principio del artículo.
