Con la llegada del otoño comienza un nuevo evento en Final Fantasy XIV: A Realm Reborn… ¡All Saints´ Wake! Desde esta mañana y hasta el 1 de noviembre podemos disfrutar de este nuevo evento de Halloween en toda Eorzea donde podremos hacernos con un traje con el que asustar a nuestros amigos y varios dulces típicos del evento.

Las hojas de los árboles cambian de color y el calor del verano deja su paso a la brisa de otoño, una vez más los habitantes de Eorzea se preparan para celebrar las festividades de All Saints´  Wake. Con la llegada de esta festividad, por las calles de las tres ciudades principales – Gridania, Ul´dah y Limsa Lominsa – han comenzado a aparecer extraños personajes con aterradores trajes cuyo origen está siendo investigado por The Raven.

Historia

La festividad de All Saints´ Wake es una antigua tradición basada en la leyenda de que cada año los Twelve honran a los santos Daniffen, Randolfe y Llafymae – los cuales son venerados como modelos de virtud – invitándolos a un gran banquete en el reino celestial durante la cual los reinos mortales se ven despojados de su protección divina. Se decía que las criaturas de la oscuridad aprovechaban estos momentos para salir de su escondite y causar estragos en los reinos mortales por miedo a esto los habitantes de Eorzea regresaban a sus casas antes del anochecer y levantaban barricadas en las puertas y ventana hasta que llegaba el amanecer de un nuevo día.

Pero los valientes aventureros en vez de esconderse aterrorizados durante la noche de All Saints´ Wake salían afuera en busca del peligro con el fin de acabar con cualquier cosa que osará amenazar a los habitantes de Eorzea. Con el paso de los años la actitud valiente de estos aventureros consiguieron que los habitantes de Eorzea perdieran el miedo a esta aterradora noche y aprendieran a celebrar la ascensión a los cielos de los santos en lugar de temer su ausencia.

Con el tiempo se empezó a adornar las calles de las ciudades con linternas ceremoniales hechas de calabazas y los niños se disfrazaban con todo tipo de trajes fantásticos para disfrutar de una noche de trucos y tratos convirtiéndose así en la festividad que es ahora. Esto fue así hasta la llegada de la Calamidad y el comienzo de la Séptima Era. Con la intención de reavivar esta celebración, una misteriosa compañía de circo ambulante ha hecho acto de aparición durante la noche en las tres ciudades principales de Eorzea ataviados con disfraces extrañamente realistas.